dimecres, 23 de novembre del 2011

Zahara | Cartas Entrelazadas

Atentamente: Mrs. Apio

dimarts, 26 de juliol del 2011


Hatem Prayer Team | Hola A Todo El Mundo


Finalmente lo reducimos todo a cajas, serán las despedidas, sobres, dentro de cajitas que se amontonan en una caja mayor.

Me siento en tu butaca, la que me servia de refugio anti vaqueros malvados cargados con revolvers en las tardes de Marzo del '95, cuando la lluvia se precipitaba sobre este pedazo de tierra al este de casi todo. Lentamente empiezo a escudriñar unas pequeñas cajas de ILFORD, apareces en algunas fotos, solo o no, te reconozco en todas, de alguna forma también me reconozco a mi misma en ellas, en otras reconozco tu forma particular de ver el mundo, que suerte que te gustara retratar. Te rodeas de caras sonrientes, de un Joaquín joven, sin entradas, de Carmen, en la altura que nos pasábamos las tardes en su casa, caras que reconozco, personas que me presentaste, que quisiste que conociera, otras que nunca conoceré, personas, gestos que capturaste y que se han marchado en tu memoria, solo me queda alguna nota en tu inconfundible caligrafía en los reversos "Maria, Palma": Quien es? de que os conocías? porque le hiciste esa foto?. De golpe y porrazo todo este arsenal de recuerdos me pertenece de alguna manera, me abruma, desmesurado. Pero me aferro a el, porque percibo que en estos papeles fotográficos queda algo de tu esencia, tus horas en el estudio de revelado, los días y semanas guiñando el ojo para observar a través del objetivo. Encuentro un álbum lleno de una yo en miniatura, de cuando la explanada era bonita y para jugar, ese día debiste perseguirme al rededor de la plaza y yo andaba sola y curiosa gracias a la libertad que nunca dudaste en otorgarme. Mas fotos, de Hermano y Madre, de vosotros y de nosotros, ignorando nuestro futuro, supongo que eso siempre es bueno, así sufrimos menos.

Guardo las fotos, solo me llevo una, aparecemos tu y yo riendo, me gusta y me parece que hasta puedo olerte.

El gato te echa de menos, y nosotros tambien.

dimarts, 24 de maig del 2011

On My Way | Micah P. Hinson

Incapaz de quitarme escayolas después de las caídas, me trasformo sin darme cuenta en una especie de melodía neo-futurista, sin ningún tipo de sincronía ni sentido, incluso, aveces, me sorprendo escuchándome a mi misma como a la mayor desconocida. Es demasiado tiempo, creo, sin ordenar los cajones de la azotea. Y talvez, habrás reparado ya en el hecho que nunca pregunto en que piensas, pues si algo aprendí fue que no debes, necesariamente, estar pensando en nada , y en caso de que lo hagas lo mejor no es que me lo cuentes por mucho que te insista, pues probablemente no me gustaría oírlo, pero de todas maneras, si piensas, en efecto, en algo, que crees que me gustaría oír y además tienes ganas de contarlo te escucharé mientras te acaricio el reverso de la oreja izquierda.
Yo Soy Simon Tu Garfunkel | The New Raemon


Tu me hablas de colchones

Soy ese tipo de chica que huye de estereotipos. Soy ese tipo de chica.


Yo te agobio con canciones

Me gusta que te guste estar junto a mi, traducirnos en roces y caricias, aunque, y a riesgo de echarlo todo a perder, debo confesarte que soy una chica complicada de entender, rara. Ni yo misma consigo, en la mayoría de ocasiones darme una explicación mínimamente lógica. Tan pronto me enternecen cuatro palabras cursis como me incomoda tu palpitación y me alejo de ti sin explicación, para volver a la semana como si nada.

diumenge, 3 d’abril del 2011

Bigott | My My Love

Me gusta este hospital, con sus habitaciones blancas, sus sabanas limpias, me gustan los pasillos anchos e iluminados por este sol insular, me gusta el celador que te trae el desayuno, me gusta la enfermera que te cambia el suero y la auxiliar que te ayuda a ducharte. Me gusta este hospital porque tiene una planta infatil llena de dibujos y colores. Me gusta porque es tranquilo y agradable. Me gustan las vistas al cielo de esta habitacion de este hospital. No me gusta que estes en este hospital, no me gusta no poder abrazarte fuerte hasta que no pueda respirar, no me gusta tener que apartar tubos de tu cara para poder darte un beso, no me gusta que estes enfermo, me repatea no poder ayudarte. Si pudiera pedir un deseo, juntaria en uno todos los momentos, cuando jugabamos a ser dos viejacitas parlanchinas en el carrer des Port, cuando te pedia que me pusieras pomada en la mano y que te la pusieras tu en la nariz, cuando, en la terraza pintabamos los dos, yo al principito y tu a Dalí sobre los din A2 que traias del trabajo y a los que les dabamos la vuelta para que fueran blancos del todo. El dia que me desperté llorando porque había soñado que te habian encarcelado y que nunca mas volveria a verte y fui corriendo a tu cama a tumbarme a tu lado y lloré mas tranquila. Nuestro viaje, tuyo y mio y de nadie mas, nuestras horas de carretera y noches nómadas, los kilómetros que compartimos y La Imagen.



dilluns, 14 de febrer del 2011


Chemestry | Kimya Dawson



Un dia tendremos ochenta años, tendremos ochenta años y nos casaremos, seremos los decorosos out-going, el erasmus de repesca. Andaremos en los mejores clubes nocturnos hasta reventar los taca-taca y por la mañana, ausentes de resaca desayunaremos, en el jardin de nuestra casa destartalada, panqueques y té rojo con leche, regalaremos risas destroza-dentaduras-postizas al vientecito de primavera y yo me mancharé la naríz con la tarta de fresas. Nos contaremos las mismas histórias una y otra véz, añadiendoles girnaldas de fantasia que las harán más heróicas y divertidas, me recordarás el perfume que lucía a los veite años y escucharemos fados y tangos porque seremos la mar de internacionales. Los gaticos jurarán con los caracoles de las macetas de barro y todos los amigos, nuestra familia, sabrán que escondemos la llave de casa bajo la piedra entre el geránio y el bote de canícas. Con la experiencia de la edad, y la dignidad que la misma alporta un dia tras el paseito vespertino, tipico ya a estas alturas del verano, llegaremos a casa y encontraremos a las valencianas con el brasileño preparando brigareiro y unos vasitos de yougurt llenos de vinho do Porto, Ferreira quince años, que degustaremos mientras Cristina, Luís y Laura esten de camino, que llegan tarde porque han parado a comprar cebollas zanahórias patatas y huevos, que hoy cenamos en família, y el cochecito amarillo que los trae es casi tan viejecito como nosotros. Reiremos como lo hemos hecho siempre y divagaremos sobre cucharas y cucharones.
Un dia tendremos ochenta años, y mi melena blanca me llegara a las costas, y la recogeré con un pincel viejo. Tendremos ochenta años y ya no sufriremos, los hijos independientes, la muerte de los padres muy lejana ya.
Tendremos ochenta años y todo el barrio nos querrá.

diumenge, 23 de gener del 2011

Casimir Pulaski Day | Sufjan Stevens



Nos intercambiamos los papeles, tu reposa la cabeza sobre mi pecho que te acaricio la melena ausente y te canto hasta que te duermas, después de una noche de vómitos. Te preparo sopita rica, de la de comer despacito. Tranquilo pelón, que te arropo los sollozos.

diumenge, 16 de gener del 2011

Enero En La Playa | Facto Delafé Y las Flores Azules


Que se terminen los tiempos de complicaciones. No quiero que recites a Poe en sus obras póstumas, ni que me lecciones sobre vida y obra de Eurípides. Me basta con que cierres los ojos al sonar tu canción favorita y la susurres para ti solo.

divendres, 14 de gener del 2011

Paraules D'amor | J. M. Serrat


El otro dia recordé aquellos viejos acordes, bellas notas, que mi madre solia susurrar a mi oido cuando yo ni tan solo levantaba palmo del suelo. Esa canción de amor, y porque no decirlo, de tremenda realidad y crueldad. Como si ella, ya desde mi mas tierna infancia, desde mis almohadas de algodón blanco impoluto, quisiera advertirme com esa sutiliza que la caracteriza, de que fuera de nustro pequeño mundo habia también una jungla repleta de pros, pero tambien con algun dulce contra. El otra dia recordé la canción, y volví a escucharla, y la susurré, y pensé, que poco diferentes eran mi voz con la de Madre. Lloré por dentro, con el llanto placido y dulce del que no lo reprime por el sutil placer que el mismo provoca.

dissabte, 8 de gener del 2011

Pascal Pinon | I Wrote A Song


Si solo me da para escribir en verso, si soy incapaz de lanzarme a la prosa prosaica de corsarios sanguinarios, de olivos centenarios en la ladera helada por la hiedra matinal, si no puedo hacer otra cosa que repetir palabras malsonantes, consonantes aplastantes, desentendidas de sentido, para pedantes entendidos que llenan sus estantes de libros y revistas más que vistas en las listas del Top Ten de perdedores, aparadores de una vida estrepitosa, aparatosa. Desastrosa.

Me decanto por mis versitos tan cortitos como puntitos de café. Olé.
Guspira, Estel o Caricia | Mishima

De tu foto en blanco y negro,

de tus saturaciones,

de tus bordes quemados,

de las solarizaciones atrevidas

entreveo la mirada,

no los ojos,

la mirada,

de ese dia.

Solos en el parque,

[...]

insanos cacasenos

nos lanzamos a las calles,

descendiendo las laderas

hasta el jardin botanico,

como Victors de Aveyrons,

salvajes o asalvajados.

[...]

cuando aún difrutambamos de dormir

solos alguna noche

y la cama no se nos hacia inmensa

si ningún cuerpo reposaba a nuestro lado

[...]

que nos provocabamos placer

aunque solo fuera por imagen.

[...]

y yo te hice la foto

con la vieja camara de padre,

la misma con la que retrató a tantas amantes,

en previas y en despedidas.

[...]

y aún asi,

tu mirada

[...]

Habrás olvidado ya

como palpitaba

mi lóbulo derecho

al oirte susurar,

muy cerca,

[...]

[...]